Diciembre 14 de 2022
Temprano en la mañana tuve una de las capacitaciones para la plataforma del encargo fiduciario. Sin duda no es algo que uno, como director, sueña que se trata hacer películas pero es parte de ser productor de tus propias películas. Es parte de ser productor de cine independiente. Es como ese dicho: everyone wants to be the builder, none of us wants to do the maintenance.
Luego de eso me reuní con Manuel Velásquez, el director de fotografía de la película. Es muy cool trabajar con él en este proyecto, es la primera vez que trabajamos juntos en una película desde que yo fui director de fotografía y él mi primer asistente de cámara en Qué Rico País. Siento que entiende la película y lo que queremos lograr. Me imagino que tiene los mismos nervios que yo tengo ya que mucho de nuestro trabajo es reaccionar a lo que los actores van a estar haciendo. O sea, también improvisar como lo hacen los actores.
Decidimos filmar con su cámara, la RED Komodo en vez de mi cámara RED, porque vamos a estar filmando en anamórficos y en blanco & negro. Una referencia vital para esto es The Apartment de Billy Wilder.
Una referencia que Manuel me mandó fue una entrevista de Natasha Brier sobre su proceso para fotografiar Honey Boy.
Al final del día, saqué la edición de 10 años de Clerks y puse el tercer disco que es The Snowball Effect, un documental sobre la realización de la película. Desde hace mucho tiempo no lo veía porque es un cuento de hadas: Una peli hecha en medio de la nada con muy pocos recursos y sin estrellas termina estando en Sundance y siendo comprada y distribuida por uno de los estudios de cine independiente más importantes de USA.
Pero soy humano, quiero creer a veces en el cuento de hadas porque esta película, Sábado Oscuro, se siente diferente a las otras. No significa que sea mejor o más especial, sino diferente. Siento de cierta manera una responsabilidad hacia la película. Muchas personas van a pensar que es una autobiografía, pero en verdad, es una auto-ficción generada por 4 personas: Juliana, Ana, David y yo. Y a esas personas al poner mucho de sus sentimientos y experiencias en la película, siento una mayor apreciación y responsabilidad que si yo hubiera escrito el guion.
Por otro lado, estuve viendo planes y haciendo un presupuesto para asistir al Drama Series Lab en Trieste, Italia. Debo decir que después de ver un par de videos, me sorprendió mucho la ciudad. Me siento cada vez más emocionado de ir pero a la vez con algo de miedo por estar en algo que te quita mucho tiempo unos días antes de filmar la película.
Pero así es la vida del director / productor independiente... A balancing act.
El documental The Snowball Effect fue la película número 300 que veo en el 2022.
